jueves, 4 de febrero de 2016

Vidas

Nadie pertenece a nadie.

Somos vidas que se entrelazan,
con libertad suficiente para elegir
entre quedarse o marcharse.

lunes, 1 de febrero de 2016

Sangre que no se ve

Las amistades se eligen.
Y llega un momento en la vida, en el que la familia también.

La felicidad siempre está tras una puerta que nos suele quedar lejos.
Se trata de evitar cualquier tipo de dolor, venga de donde venga.
Ya casi no hay sangre en mi cuerpo
que me recuerde demasiado a casi nadie.

Yo veo esa sangre en los ojos de las personas que me quieren bien,
aunque todos hablen de los vínculos naturales que la vida ofrece sin haber solicitado.
Todos hemos tenido cerca a alguien sobrenatural,
con la capacidad suficiente para hacerte sentir como en casa.
Los referentes que tuve fueron ese oasis que cada uno quiere ver en su propio desierto,
en su huida particular hacia ningún sitio.

Duele, sí, pero ya no tengo interés alguno en darle hueco en mi pecho
a quien no se preocupó por los latidos que faltaban o sobraban en él.


domingo, 31 de enero de 2016

Un domingo cualquiera

Lo peor no es que te vayas.
Lo peor es que no te quedes.

viernes, 29 de enero de 2016

Nada en contra

Tú haces las cosas a tu modo, y yo te dejo ser como eres.
No tengo nada en contra.

Pides tiempo a menudo, y yo tengo todo el tiempo del mundo.
No tengo nada en contra.

Dices lo que quieres aunque a veces duela, y lo respeto.
No tengo nada en contra.

Escribes cada cosa que se te ocurre,
con la delicadeza característica de quien no la conoce, pero así eres tú.
No tengo nada en contra.

Y, aunque te acepto, sé de sobra que lo bueno es que no tengo nada en contra,
pero lo malo es que no tengo nada a favor.